Tengo tantos años
como horas tiene el día
y todo me sabe a sangre
a vomito de idilios y melancolía.
…harta de ser cubierta, encerrada, reprimida, juzgada, acallada y encorsetada por el enorme sostén que esta pacata sociedad machista y retrograda nos quiere obligar a poner. Ser mujer asusta y asustó siempre, PERO LAS NIÑAS TAMPOCO LLORAN…
Tengo tantos años
como horas tiene el día
y todo me sabe a sangre
a vomito de idilios y melancolía.
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Yo me entrego a la noche
como un ave sin nido
Sin canto
sin patria
sin vida
Consumida en el exilio
del desgaste de mis alas
Delirio febril
sueños de mi sangre enmohecida
Vendrá otra vez Amanecer
y arrancara de mis pupilas
las paz Oscuridad
Luna ya no mengua para mi
un lecho colgante
Tampoco la Noche me pertenece ahora
Tendré que esconderme o enfrentar el Día